Libro: Problemas en el ropero… y otros versos diversos / Autora: Liliana Cinetto / Ilustradora: Mima Castro / 48 páginas. Edelvives, Serie Ala Delta Azul. (De 8 a 10 años)
Polillas invasoras, ombligos paseanderos, tijeras traviesas que hacen de las suyas por cada lugar que pasan, frutas bailarinas y monstruos peludos que pretenden devorarse a las princesas son algunos de los temas con los que Liliana Cinetto nos sumerge en el humor y la poesía.
Contenido:
-Problemas en el ropero
-El ombligo paseandero
-El fantasma enfermo
-El viaje del sapo
-Las travesuras de la tijera
-La escuela de los gatos
-Algo pasa en esta casa
-El estornudo
-La escuela del pantano
-Mambo de las frutas
-El cumpleaños del oso
-El ciempiés descalzo
-El sapo con zapatillas
-Discusión en el desayuno
-El supermercado
-El monstruo y la princesa
Risas y más risas en cada verso
Polillas invasoras, ombligos paseanderos, tijeras traviesas que hacen de las suyas por cada lugar que pasan, frutas bailarinas y monstruos peludos que pretenden devorarse a las princesas son algunos de los temas con los que Liliana Cinetto nos sumerge en el humor y la poesía.
Contenido:
-Problemas en el ropero
-El ombligo paseandero
-El fantasma enfermo
-El viaje del sapo
-Las travesuras de la tijera
-La escuela de los gatos
-Algo pasa en esta casa
-El estornudo
-La escuela del pantano
-Mambo de las frutas
-El cumpleaños del oso
-El ciempiés descalzo
-El sapo con zapatillas
-Discusión en el desayuno
-El supermercado
-El monstruo y la princesa
Información temática:
Género: Poesía
Temática: Humor
Categoría: Colección literaria
Área de conocimiento: Lengua y Literatura
Valores: Creatividad, imaginación, iniciativa personal / Sentido del humor
Poesía» Problemas en el ropero
Sucedió algo muy extraño
hace muchos, muchos años
pues, de pronto, una mañana
en un vestido de lana
que vivía en un ropero…
¡apareció un agujero!
Lloraba desesperado
el vestido agujereado
mientras le daban consuelo
desde un cajón los pañuelos.
Acusaba a la tijera
que todo lo cortajea
un viejo par de zoquetes
sumamente meteretes.
Pero un pijama le dijo:
—Ella corta muy prolijo.
Criticaban los dos guantes:
—Roperos eran los de antes.
Preocupadas varias medias
que estaban bastante serias
pedían al pantalón que
busque una explicación.
Este retó a la camisa
que estaba muerta de risa
y pidió ayuda al tapado
colgado del otro lado.
Pero el saco entrometido
interrogó a los testigos:
—No sé, yo estaba de viaje,
explicaba serio un traje.
—Yo fui a pasear un buen rato,
se defendía un zapato.
—Yo le pido mil excusas,
se disculpaba una blusa,
pero me estoy arrugando
de tanto que estoy pensando.
Pudo haber sido cualquiera
sospechaban las remeras,
le contestó de mal modo
ofendido el sobretodo.
La corbata proponía:
—Llamen a la policía.
Como todos discutían
la bufanda se aburría.
Buscaron intensamente
hasta que por accidente
dentro de una zapatilla
hallaron a una polilla.
Se entregó sin resistencia
pero pedía clemencia,
pues estaba allí escondida
realmente arrepentida.
Confesó ser la culpable
porque estaba muerta de hambre
y aunque al fin la perdonaron
de ese ropero la echaron.
(c)Liliana Cinetto
hace muchos, muchos años
pues, de pronto, una mañana
en un vestido de lana
que vivía en un ropero…
¡apareció un agujero!
Lloraba desesperado
el vestido agujereado
mientras le daban consuelo
desde un cajón los pañuelos.
Acusaba a la tijera
que todo lo cortajea
un viejo par de zoquetes
sumamente meteretes.
Pero un pijama le dijo:
—Ella corta muy prolijo.
Criticaban los dos guantes:
—Roperos eran los de antes.
Preocupadas varias medias
que estaban bastante serias
pedían al pantalón que
busque una explicación.
Este retó a la camisa
que estaba muerta de risa
y pidió ayuda al tapado
colgado del otro lado.
Pero el saco entrometido
interrogó a los testigos:
—No sé, yo estaba de viaje,
explicaba serio un traje.
—Yo fui a pasear un buen rato,
se defendía un zapato.
—Yo le pido mil excusas,
se disculpaba una blusa,
pero me estoy arrugando
de tanto que estoy pensando.
Pudo haber sido cualquiera
sospechaban las remeras,
le contestó de mal modo
ofendido el sobretodo.
La corbata proponía:
—Llamen a la policía.
Como todos discutían
la bufanda se aburría.
Buscaron intensamente
hasta que por accidente
dentro de una zapatilla
hallaron a una polilla.
Se entregó sin resistencia
pero pedía clemencia,
pues estaba allí escondida
realmente arrepentida.
Confesó ser la culpable
porque estaba muerta de hambre
y aunque al fin la perdonaron
de ese ropero la echaron.
(c)Liliana Cinetto
Fuente consultada:
Programa radial "Leerlo en Voz Alta" de la 92.1 “La voz del Cerro”
Transmisión en vivo - 10 de julio de 2019.
Lectura del poema: “Problemas en el ropero”. Tiempo de reproducción: 6:25
https://www.facebook.com/leerloenvozalta/videos/435982033799388/
Programa radial "Leerlo en Voz Alta" de la 92.1 “La voz del Cerro”
Transmisión en vivo - 10 de julio de 2019.
Lectura del poema: “Problemas en el ropero”. Tiempo de reproducción: 6:25
https://www.facebook.com/leerloenvozalta/videos/435982033799388/
Poesía» El viaje del sapo
Con muy poquito equipaje
que preparó en un segundo
el sapo se fue de viaje
para dar la vuelta al mundo.
El ciempiés le regaló
una sombrilla de trébol
y con un papel de diario
le hizo un gorro marinero.
Con ovillos de neblina
la araña le había tejido
una bufanda plateada
por si hacía mucho frío.
Zarpó en un barco de otoño
hecho con hojas doradas
cuando el viento dibujaba
garabatos en el agua.
Lo despidieron dos ranas
desde un charquito, en la orilla
que agitaban en el aire
su pañuelo con puntillas.
Navegó por el arroyo
justo hasta el atardecer.
Navegaba rumbo al mar
que soñaba conocer.
El horizonte a lo lejos
ya se teñía de rojo
porque el sol se iba a acostar
mientras le guiñaba un ojo.
Y con rumbo al mar se fue
conversando con la luna
que le cantaba a la noche
su blanca canción de cuna.
(c)Liliana Cinetto
que preparó en un segundo
el sapo se fue de viaje
para dar la vuelta al mundo.
El ciempiés le regaló
una sombrilla de trébol
y con un papel de diario
le hizo un gorro marinero.
Con ovillos de neblina
la araña le había tejido
una bufanda plateada
por si hacía mucho frío.
Zarpó en un barco de otoño
hecho con hojas doradas
cuando el viento dibujaba
garabatos en el agua.
Lo despidieron dos ranas
desde un charquito, en la orilla
que agitaban en el aire
su pañuelo con puntillas.
Navegó por el arroyo
justo hasta el atardecer.
Navegaba rumbo al mar
que soñaba conocer.
El horizonte a lo lejos
ya se teñía de rojo
porque el sol se iba a acostar
mientras le guiñaba un ojo.
Y con rumbo al mar se fue
conversando con la luna
que le cantaba a la noche
su blanca canción de cuna.
(c)Liliana Cinetto
Visto y leído en:
Blog: El príncipe de los mirlos - Recopilación de poesía infantil
http://elprincipedelosmirlos.blogspot.com/2013/02/el-viaje-del-sapo-de-liliana-cinetto.html
Comunidad iVoox. Audio compartido por Laura.
https://www.ivoox.com/viaje-del-sapo-audios-mp3_rf_3507213_1.html
(iVoox es una plataforma donde poder reproducir, descargar y compartir audios de todo tipo de temáticas y géneros.)
Blog: El príncipe de los mirlos - Recopilación de poesía infantil
http://elprincipedelosmirlos.blogspot.com/2013/02/el-viaje-del-sapo-de-liliana-cinetto.html
Comunidad iVoox. Audio compartido por Laura.
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Poesía» Las travesuras de la tijera
En el costurero ayer
protestaba un alfiler:
—¡Qué traviesa es la tijera!
todo, todo cortajea.
—Miren cómo me ha mordido,
dijo un hilván descosido.
—Con sus dos ojos me espía
mientras corta todo el día,
la acusó un metro de tela
bordado con lentejuelas.
—A mí me tiene cansada,
dijo una cinta enojada.
—La tijera es una bruja,
gritó ofendida una aguja,
porque arruina mi trabajo
cada vez que le hace un tajo
Cuando el cierre abrió la boca
opinó que estaba loca.
—Con sus dientes afilados
está siempre haciendo estragos,
lloraba un hilo enredado
y un poco deshilachado.
Lo consolaba la lana
que tejía en la ventana.
—Yo estoy quedando muy flaco
pues me corta a cada roto,
le decía a un dobladillo
muy preocupado el ovillo.
Al centímetro pedían
que al fin tomara medidas.
Muy orgulloso, el dedal,
con su traje de metal
era el único valiente
que se ofreció a hacerle frente.
Pero entonces se enteraron
de lo que había pasado.
El chismoso del botón
asomado en el balcón
del ojal de una camisa
les dijo muerto de risa:
—La tijera impertinente
se rompió todos los dientes.
Se lastimó de este modo:
por querer cortarlo todo
quiso cortar la tijera
el cordón de aquella acera.
Y así fue que la bromista
terminó yendo al dentista.
(c)Liliana Cinetto
protestaba un alfiler:
—¡Qué traviesa es la tijera!
todo, todo cortajea.
—Miren cómo me ha mordido,
dijo un hilván descosido.
—Con sus dos ojos me espía
mientras corta todo el día,
la acusó un metro de tela
bordado con lentejuelas.
—A mí me tiene cansada,
dijo una cinta enojada.
—La tijera es una bruja,
gritó ofendida una aguja,
porque arruina mi trabajo
cada vez que le hace un tajo
Cuando el cierre abrió la boca
opinó que estaba loca.
—Con sus dientes afilados
está siempre haciendo estragos,
lloraba un hilo enredado
y un poco deshilachado.
Lo consolaba la lana
que tejía en la ventana.
—Yo estoy quedando muy flaco
pues me corta a cada roto,
le decía a un dobladillo
muy preocupado el ovillo.
Al centímetro pedían
que al fin tomara medidas.
Muy orgulloso, el dedal,
con su traje de metal
era el único valiente
que se ofreció a hacerle frente.
Pero entonces se enteraron
de lo que había pasado.
El chismoso del botón
asomado en el balcón
del ojal de una camisa
les dijo muerto de risa:
—La tijera impertinente
se rompió todos los dientes.
Se lastimó de este modo:
por querer cortarlo todo
quiso cortar la tijera
el cordón de aquella acera.
Y así fue que la bromista
terminó yendo al dentista.
(c)Liliana Cinetto
Visto y leído en:
Proyecto “Leemos en el tranvía de Tenerife”
LECTURAS 2014
http://leemoseneltranvia.blogspot.com/p/nuestras-lecturas.html
Proyecto “Leemos en el tranvía de Tenerife”
LECTURAS 2014
http://leemoseneltranvia.blogspot.com/p/nuestras-lecturas.html
Poesía» El estornudo
Una vez el estornudo
decidió quedarse mudo
y su conocido ¡achís!
no salió por la nariz.
Todo el cuerpo preocupado
preguntaba: —¿Qué ha pasado?
—¿Y si le hacemos cosquillas?,
propusieron las rodillas.
—Déjenlo, no le hagan caso,
decía ofendido un brazo.
Pero el pie le contestó:
—Esa no es la solución.
Algo tenemos que hacer.
—Yo así no lo puedo ver,
le dijo un ojo a la oreja
que lo escuchaba perpleja.
El ombligo indiferente
conversaba con los dientes.
Y los hombros aburridos
decían: —Se habrá dormido.
Pero la lengua indignada
no podía estar callada
y retaba a las muñecas
que no se quedaban quietas.
—Yo me voy a volver loca,
gritó angustiada la boca.
—Para mí que es pura maña,
opinaba una pestaña.
—A lo mejor está enfermo,
le comentaron los dedos
a los codos y a las piernas
que estaban bastantes serias.
—Así no ganamos nada,
dijo la frente arrugada.
Y entre tanta discusión
la mano dio su opinión:
—Pregúntele al estornudo
por qué se ha quedado mudo
y sabremos qué pasó.
Y el estornudo explicó:
—Es que ya estoy muy cansado
de estar siempre estornudando
y que digan que molesto
cada vez que yo aparezco.
Todo el cuerpo sorprendido
escuchaba conmovido
al estornudo apenado
llorando desconsolado.
—Pero todos te extrañamos,
decían para animarlo,
aunque seas fastidioso
te queremos con nosotros.
Y le dieron tanto aliento
que el estornudo contento
agradecido y feliz
se trepó por la nariz
y saludó con su ¡achís!
(c)Liliana Cinetto
decidió quedarse mudo
y su conocido ¡achís!
no salió por la nariz.
Todo el cuerpo preocupado
preguntaba: —¿Qué ha pasado?
—¿Y si le hacemos cosquillas?,
propusieron las rodillas.
—Déjenlo, no le hagan caso,
decía ofendido un brazo.
Pero el pie le contestó:
—Esa no es la solución.
Algo tenemos que hacer.
—Yo así no lo puedo ver,
le dijo un ojo a la oreja
que lo escuchaba perpleja.
El ombligo indiferente
conversaba con los dientes.
Y los hombros aburridos
decían: —Se habrá dormido.
Pero la lengua indignada
no podía estar callada
y retaba a las muñecas
que no se quedaban quietas.
—Yo me voy a volver loca,
gritó angustiada la boca.
—Para mí que es pura maña,
opinaba una pestaña.
—A lo mejor está enfermo,
le comentaron los dedos
a los codos y a las piernas
que estaban bastantes serias.
—Así no ganamos nada,
dijo la frente arrugada.
Y entre tanta discusión
la mano dio su opinión:
—Pregúntele al estornudo
por qué se ha quedado mudo
y sabremos qué pasó.
Y el estornudo explicó:
—Es que ya estoy muy cansado
de estar siempre estornudando
y que digan que molesto
cada vez que yo aparezco.
Todo el cuerpo sorprendido
escuchaba conmovido
al estornudo apenado
llorando desconsolado.
—Pero todos te extrañamos,
decían para animarlo,
aunque seas fastidioso
te queremos con nosotros.
Y le dieron tanto aliento
que el estornudo contento
agradecido y feliz
se trepó por la nariz
y saludó con su ¡achís!
(c)Liliana Cinetto
Visto y leído en:
Video Poesía El estornudo (Liliana Cinetto) - Publicado por: Seño Silvi (Imagen)
https://www.youtube.com/watch?v=JZIjEAaufeM
Los viceVERSOS (poemas cóncavos y convexos)
https://losviceversos.blogspot.com/2016/03/el-estornudo.html
AULAS CREATIVAS
http://misaulascreativas.blogspot.com/2016/01/poema-el-estornudo.html
Trabajando en 2B
http://trabajandoen2b2016.blogspot.com/2016/07/poema-de-liliana-cinetto.html
Video Poesía El estornudo (Liliana Cinetto) - Publicado por: Seño Silvi (Imagen)
https://www.youtube.com/watch?v=JZIjEAaufeM
Los viceVERSOS (poemas cóncavos y convexos)
https://losviceversos.blogspot.com/2016/03/el-estornudo.html
AULAS CREATIVAS
http://misaulascreativas.blogspot.com/2016/01/poema-el-estornudo.html
Trabajando en 2B
http://trabajandoen2b2016.blogspot.com/2016/07/poema-de-liliana-cinetto.html
Poesía» La escuela del pantano
Van llegando los alumnos
a la escuela del pantano
pues en el mes de diciembre
se dan clases en verano.
La araña muy hacendosa
en un rincón escondido
con hilo y con ocho agujas
da lecciones de tejido.
Repite serio el mosquito
en voz alta la lectura
que explica paso por paso
cómo dar las picaduras.
La rana con salvavidas
y una bikini marrón
empieza a dar en un charco
su clase de natación.
Con delantal y con gorro
una abeja en la cocina
enseña cómo hacer miel,
su comida preferida.
El sapo en el trampolín
da nociones generales
a aquel que quiere intentar
dar saltos ornamentales.
El grillo dirige el coro
con su prima la cigarra.
Mientras él enseña canto
ella toca la guitarra.
Silencio, pide la hormiga
porque ya empiezan las clases
y lo reta al caracol
porque siempre llega tarde.
(c)Liliana Cinetto
a la escuela del pantano
pues en el mes de diciembre
se dan clases en verano.
La araña muy hacendosa
en un rincón escondido
con hilo y con ocho agujas
da lecciones de tejido.
Repite serio el mosquito
en voz alta la lectura
que explica paso por paso
cómo dar las picaduras.
La rana con salvavidas
y una bikini marrón
empieza a dar en un charco
su clase de natación.
Con delantal y con gorro
una abeja en la cocina
enseña cómo hacer miel,
su comida preferida.
El sapo en el trampolín
da nociones generales
a aquel que quiere intentar
dar saltos ornamentales.
El grillo dirige el coro
con su prima la cigarra.
Mientras él enseña canto
ella toca la guitarra.
Silencio, pide la hormiga
porque ya empiezan las clases
y lo reta al caracol
porque siempre llega tarde.
(c)Liliana Cinetto
Visto y leído en:
POEMAS QUE CUENTAN HISTORIAS. Textos de autor y de tradición oral. Ilustrado por Viviana Bilotti
Mi biblioteca personal - Dirección General de Cultura y Educación, Provincia de Buenos Aires, y Editorial Universitaria de Buenos Aires (EUDEBA)
http://servicios.abc.gov.ar/comunidadycultura/mibibliotecapersonal/libros.html
http://abc.gob.ar/primaria/sites/default/files/documentos/poemas_que_cuentan_historias_3_anio.pdf
POEMAS QUE CUENTAN HISTORIAS. Textos de autor y de tradición oral. Ilustrado por Viviana Bilotti
Mi biblioteca personal - Dirección General de Cultura y Educación, Provincia de Buenos Aires, y Editorial Universitaria de Buenos Aires (EUDEBA)
http://servicios.abc.gov.ar/comunidadycultura/mibibliotecapersonal/libros.html
http://abc.gob.ar/primaria/sites/default/files/documentos/poemas_que_cuentan_historias_3_anio.pdf
Poesía» El cumpleaños del oso
Como el oso cumple años
y quiere hacer una fiesta
viene toda su familia
a la hora de la siesta.
Esa mañana, su esposa
para darle una sorpresa:
le ha preparado una torta
de chocolate y cereza.
Lo abrazan sus cuatro hijos
y el oso feliz los deja
que le den muertos de risa
un largo tirón de orejas.
Son su mamá y su papá
los primeros invitados
que le han comprado una caja
de bombones de pescado.
Llega enseguida su hermana
con sobrinos y sobrinas
y hasta un pariente lejano
que ha venido de la China.
Su abuela corta de vista
cree que habla con la tía,
pero en realidad conversa
con una silla vacía.
Su primo del Polo Norte
trae un regalo muy raro:
un puñadito de nieve
y cuatro kilos de helado.
Cuando ya no falta nadie
sopla las velas el oso
¡Qué los cumplas muy feliz!
canta toda su familia.
(c)Liliana Cinetto
y quiere hacer una fiesta
viene toda su familia
a la hora de la siesta.
Esa mañana, su esposa
para darle una sorpresa:
le ha preparado una torta
de chocolate y cereza.
Lo abrazan sus cuatro hijos
y el oso feliz los deja
que le den muertos de risa
un largo tirón de orejas.
Son su mamá y su papá
los primeros invitados
que le han comprado una caja
de bombones de pescado.
Llega enseguida su hermana
con sobrinos y sobrinas
y hasta un pariente lejano
que ha venido de la China.
Su abuela corta de vista
cree que habla con la tía,
pero en realidad conversa
con una silla vacía.
Su primo del Polo Norte
trae un regalo muy raro:
un puñadito de nieve
y cuatro kilos de helado.
Cuando ya no falta nadie
sopla las velas el oso
¡Qué los cumplas muy feliz!
canta toda su familia.
(c)Liliana Cinetto
Visto y leído en:
En: SlidePlayer. Presentación publicada por Chuy Telleria
https://slideplayer.es/slide/3856471/
(SlidePlayer es un visor flash de presentaciones realizadas con Powerpoint u OpenOffice Impress. Permite integrar de una forma fácil y elegante una presentación de diapositivas en una entrada del blog, wiki, moodle, joomla o página web)
En: SlidePlayer. Presentación publicada por Chuy Telleria
https://slideplayer.es/slide/3856471/
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Poesía» El sapo con zapatillas
Un sapo con zapatillas
salió a pasear por la orilla
de un charquito de jabón
y ¡FIUUU! tuvo un resbalón.
Cayó el pobre de cabeza
sobre un plato de cerezas
que justamente comía
de desayuno una hormiga.
Quedó todo colorado
y con el traje arrugado,
una patita torcida
y un raspón en la barriga.
Además, del coscorrón,
le salió al rato un chichón.
Lo consolaba la rana
cantándole: —Sana, sana…
Vino a atenderlo enseguida
una abeja comedida.
Le preparó té de miel
en tacita de clavel.
Improvisó una camilla
rapidito la polilla
con dos pétalos de rosa
que le dio la mariposa.
Lo vendó con mucha maña
habilidosa, la araña
con una hilacha de lana
que tejió por la mañana.
Trajo unas gotas de hielo
desde una nube en el cielo
un mosquito explorador
para calmarle el dolor.
Recetó el escarabajo
una pomadita de ajo
y le puso la lombriz
cataplasmas de maíz.
A caminar otra vez
lo ayudó, claro, el ciempiés
que le regaló un bastón
de ramitas de limón.
Al fin el sapo curado,
aunque un poco magullado,
agradeció a sus vecinos
y continuó su camino.
Desde entonces no se vio
en un charco de jabón
a otro sapo en zapatillas
que paseara por la orilla.
(c)Liliana Cinetto
salió a pasear por la orilla
de un charquito de jabón
y ¡FIUUU! tuvo un resbalón.
Cayó el pobre de cabeza
sobre un plato de cerezas
que justamente comía
de desayuno una hormiga.
Quedó todo colorado
y con el traje arrugado,
una patita torcida
y un raspón en la barriga.
Además, del coscorrón,
le salió al rato un chichón.
Lo consolaba la rana
cantándole: —Sana, sana…
Vino a atenderlo enseguida
una abeja comedida.
Le preparó té de miel
en tacita de clavel.
Improvisó una camilla
rapidito la polilla
con dos pétalos de rosa
que le dio la mariposa.
Lo vendó con mucha maña
habilidosa, la araña
con una hilacha de lana
que tejió por la mañana.
Trajo unas gotas de hielo
desde una nube en el cielo
un mosquito explorador
para calmarle el dolor.
Recetó el escarabajo
una pomadita de ajo
y le puso la lombriz
cataplasmas de maíz.
A caminar otra vez
lo ayudó, claro, el ciempiés
que le regaló un bastón
de ramitas de limón.
Al fin el sapo curado,
aunque un poco magullado,
agradeció a sus vecinos
y continuó su camino.
Desde entonces no se vio
en un charco de jabón
a otro sapo en zapatillas
que paseara por la orilla.
(c)Liliana Cinetto
Visto y leído en:
Blog: Pequeños y Escritores - Biblioteca Pública General San Martín
ABRELETRAS - Club de Chicos Escritores
http://pequenosyescritoresbpgsm.blogspot.com/2012/11/abreletras-club-de-chicos-escritores.html
Video el sapo con zapatillas x Eli
Colegio de la Reconquista
https://www.youtube.com/watch?v=AF1DzrlvgqE
Imagen: Clip Art Mag
You Are Welcome Clipart | Free download on ClipArtMag
http://clipartmag.com/you-are-welcome-clipart
Blog: Pequeños y Escritores - Biblioteca Pública General San Martín
ABRELETRAS - Club de Chicos Escritores
http://pequenosyescritoresbpgsm.blogspot.com/2012/11/abreletras-club-de-chicos-escritores.html
Video el sapo con zapatillas x Eli
Colegio de la Reconquista
https://www.youtube.com/watch?v=AF1DzrlvgqE
Imagen: Clip Art Mag
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Video» Liliana Cinetto
en El Living sin Tiempo
en El Living sin Tiempo
Narraciones orales en la voz de su autora del cuento de un monstruo y una princesa del libro "Problemas en el ropero y otros versos diversos" y un poema del libro "Veinte poesías de amor y un cuento desesperado".
En El Living sin Tiempo, capítulo 119. Buenos Aires, 7/11/2015.
En El Living sin Tiempo, capítulo 119. Buenos Aires, 7/11/2015.
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